El Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido está iniciando dos ensayos clínicos a gran escala para evaluar rigurosamente los efectos de los bloqueadores de la pubertad en jóvenes que experimentan incongruencia de género. Esta medida se produce después de un creciente debate y de una revisión importante, la revisión Cass de 2024, que destacó una falta crítica de evidencia sólida que respalde los impactos psicológicos, fisiológicos o de desarrollo a largo plazo de estos medicamentos.
El cambio en el enfoque del NHS
Durante años, los bloqueadores de la pubertad se administraron “fuera de etiqueta” a niños con disforia de género, originalmente destinados a la pubertad precoz. Sin embargo, la revisión de Cass encontró que la investigación existente era insuficiente para determinar con seguridad los efectos de los medicamentos sobre el bienestar, la función cognitiva o la fertilidad futura. Como resultado, el Servicio Nacional de Salud de Inglaterra ha restringido el uso rutinario de bloqueadores de la pubertad, limitándolos principalmente a entornos de investigación. Este cambio de política subraya un enfoque cauteloso, reconociendo la necesidad de mejores datos antes de una aplicación clínica generalizada.
Los ensayos Pathways: diseño y alcance
La nueva investigación, en el marco del programa “Pathways”, reclutará aproximadamente 226 jóvenes durante tres años. Los participantes, potencialmente de entre 10 y 12 años, según el sexo biológico, serán asignados aleatoriamente para comenzar con bloqueadores de la pubertad inmediatamente o retrasar el tratamiento durante un año. El estudio realizará un seguimiento de su salud, desarrollo y estado psicológico durante 24 meses, con revisiones clínicas continuas para determinar las necesidades de atención individuales. Un grupo paralelo de jóvenes con incongruencia de género no recibirá bloqueadores de la pubertad, lo que permitirá un análisis comparativo.
Estudio de imágenes cerebrales: Pathways Connect
Además del ensayo principal, un estudio secundario llamado “Pathways Connect” incluirá imágenes cerebrales por resonancia magnética de aproximadamente 250 participantes (tanto los que reciben como los que no reciben bloqueadores). Los investigadores analizarán escáneres cerebrales junto con evaluaciones cognitivas, con el objetivo de identificar posibles correlaciones neurológicas con los resultados del tratamiento. Los resultados iniciales no se esperan hasta dentro de al menos cuatro años, lo que pone de relieve el carácter a largo plazo de la investigación.
Preocupaciones éticas y respuesta de defensa
Los ensayos han desencadenado un debate ético. Chay Brown de TransActual sostiene que los ensayos crean una dinámica coercitiva, lo que los convierte efectivamente en la única vía para acceder a bloqueadores de la pubertad dentro del NHS. El diseño aleatorio, que deja a algunos jóvenes esperando más tiempo para recibir tratamiento, genera preocupación sobre la posibilidad de causar angustia al retrasar la intervención.
Perspectiva de expertos: la necesidad de una investigación rigurosa
Emily Simonoff, la investigadora principal, defiende el enfoque basado en ensayos, argumentando que los nuevos medicamentos a menudo requieren estudios clínicos para establecer su seguridad y eficacia. Ella sugiere que la supresión de la pubertad debería haberse probado más rigurosamente antes de su implementación generalizada, reconociendo las complejidades éticas de suspender el tratamiento mientras se busca mejor evidencia.
La falta de datos de alta calidad sobre los bloqueadores de la pubertad subraya una tendencia más amplia en la medicina de género: la necesidad de una práctica cuidadosa y basada en evidencia. Estos ensayos representan un paso vital hacia la comprensión de las consecuencias a largo plazo de estas intervenciones, garantizando que los jóvenes reciban la atención más adecuada e informada.
Los resultados de estos ensayos remodelarán las directrices clínicas e influirán en cómo se administra la atención de afirmación de género en el Reino Unido, lo que podría afectar también a las prácticas internacionales.
